Tal y como se intuía la Hermandad de la Virgen de la Alegría no fue aceptada en el seno de la Asociación de Cofradías y Hermandades y, por tano, no podrá desfilar en la Procesión de Domingo de Resurrección del 2015 como había planteado, ya que en la votación secreta que se produjo entre los asistentes se registraron catorce votos en contra, seis afirmativos y cinco abstenciones.
Fue el desenlace de una sesión de una hora de duración, aproximadamente, que colgó el cartel de no hay billetes, ya que el salón de la Asociación de Cofradías lució sus mejores galas de expectación ante la petición de esta joven Hermandad de poder incorporarse al seno de ésta, tal y como dijo en su breve intervención inicial el presidente, Eduardo Tortosa.
Éste, escoltado por alguno de los jóvenes componentes, que, hace unas semanas asistían a la bendición de la imagen en la Capilla del Colegio de Compañía de María, tuvieron que escuchar en el pasillo el contundente informe de la junta directiva que finalizaba, tras innumerables reparos y reproches, con la no inclusión de la Hermandadque previamente había presentado un presupuesto inicial de más de 62.000 euros.
El informe de la junta directiva, fruto del proyecto de 40 páginas que, previamente, había presentado la Hermandad, apenas vio algo de positivo en el nacimiento de una nuevo proyecto ya que la reflexión de partida fue, precisamente, que la Semana Santa no necesitaba, en el escenario actual, ninguna nueva cofradía, al tiempo que se preguntaban la necesidad o interés de una imagen mariana en la Procesión de Domingo de Resurrección.
Informe muy duro
Francisco Juárez fue el encargado de leer un extenso y minucioso informe en el que se echaban de menos más datos sobre la imagen y otros elementos adicionales, al margen de la propia Virgen, como el trono, túnicas, orfebrería, estandartes, báculos o anagrama, al tiempo que consideraban "poco respetuoso" el hecho de haber conocido, por los medios de comunicación, el desarrollo de este proyecto, por lo que se preguntó el interés para el conjunto de la Semana Santa el alumbramiento de una nueva hermandad.
También consideró "excesivos los halagos" que se reparten en el proyecto de la hermandad hacia el escultor, Eduardo Sánchez, en opinión de la junta directiva, "sin ningún bagaje artístico", y echaron de menos otros actos, al margen de sus desfiles procesionales, a lo largo del calendario.
También se les reprochó que la nueva Hermandad se tomara algunas licencias por su cuenta, como intentar realizar un traslado en la noche del Lunes Santo desde el Colegio hacia el Museo de Semana Santa, o el orden propuesto para desfilar tanto en la bajada de Domingo de Resurrección, como en la subida.
Además también se reconoció que la Comisión de Imaginería no se ha reunido, ya que al final del Pleno el propio presidente deslizó los objetivos de la junta directiva de dar un giro con el fin de conseguir que aquélla sea mucho más eficiente en sus funciones.
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