Datos del corpus de sevilla 2015

Ni el calor pudo con la excepcional salida del Señor de la Cena

El Señor de la Cena es uno de los grandes alicientes en el día del Corpus Christi, incluso llega a aglutinar a más personas que en la propia procesión organizada por el Cabildo Catedralicio.

Cuarenta y cinco años presidiendo el altar del palacio Arzobispal.  Durante este tiempo, se ha trasladado en furgoneta, con el misterio al completo y como lo suele hacer más, en el paso del Señor de la Humildad y Paciencia.

Ida

A las seis y media de la mañanacuando los vencejos anuncian un nuevo amanecer aunque especial al ser la última fiesta de la primavera en Sevilla y de las más importantes el Señor de la Cena cruza el dintel de la puerta de la iglesia de los Terceros para iniciar un traslado íntimo pero cada vez con más público.

Diferente con respecto a la vuelta.Aquí vemos los primeros cofrades que van a participar o a ver la procesión del Corpus. Vemos como con el paso en la calle despierta Sevilla. Suena una música distinta con la escolanía de María Auxiliadora y los ministriles de la banda de las Cigarreras.

Casi dos horas de traslado que impulsa a que los sevillanos se acerquen hasta el en torno de la Catedral. Una vez alcanzado las dependencias del Arzobispado, los hermanos de la Cena se unen al cortejo del Corpus Christi.

Galería fotográfica: Manuel Jesús Rodríguez Rechi

Vuelta

Justo una vez que la custodia de Arfe hace su entrada por la puerta de Palos,el cortejo comienza a formarse para iniciar el regreso triunfal hasta la iglesia de los Terceros.

Es el instante de mayor público y también de esperar al Cristo tomando un refrigerio allá por donde transita.Este caso ocurre en mayor proporción en la plaza de la Pescadería. Allí, muchos cofrades y personal del mundo de abajo se reúne a esperarlo.

Nuevamente vuelve a surgir el comentario ya tradicional de los cofrades preguntándose de cuando volverá a salir el misterio en el Corpus o el del Cristo de la Cena luce más sólo que el Domingo de Ramos con los doce apóstoles. La realidad, una gran oportunidad del que aún no lo haya hecho de conocer a esta portentosa obra de Sebastián Santos y volver a comprobar con plena luz del día, la satisfactoria última intervención realizada por Silvia Patricia Martínez García-Otero y Juan Abad.

Cuando el calor más apretaba, el paso iniciaba un portentoso andar de frente para recortar así, el máximo tiempo posible de estancia en la calle de una cuadrilla a la altura de la circunstancias.

A las tres y media de la tarde con la marcha real y el himno eucarístico daba por finalizada esta procesión que en ningún momento quedó falto de personas. Todo ha vuelto a la normalidad en los Terceros. A pesar del enorme esfuerzo de esta priostía, el paso fue desmontado cuando era desalojado el templo. Una priostía que además también ha participado en la instalación del balcón situado en la librería San Pablo de la calle Sierpes.