Un gato en un retablo en utrera

El animal se ha colado en la iglesia y ya ha tirado candelabros, floreros y se tema que pueda dañar alguna imagen de valor

Retablo en el que se ha refugiado el gato

En los últimos días se está viviendo una situación ciertamente curiosa en la iglesia de Santiago de Utrera, que mantiene en vilo a las hermandades que tienen allí su sede (El Silencio y Los Gitanos), a los fieles y al propio párroco. Al parecer un travieso gato, se ha encaprichado con el templo, se ha colado allí y ha establecido su hogar en el retablo donde está la imagen del Redentor Cautivo, provocando algunos pequeños destrozos en el mobiliario de la propia iglesia y generando preocupación entre los feligreses.

Hasta el momento los daños han sido pequeños y están centrados en la llamada capilla del Bautismo, donde se encuentran los titulares de la hermandad del Si su escondrijo, que se sitúa en una hornacina que está en la parte superior del retablo, el gato ha tirado un candelabro que estaba situado en el altar, produciendo algunas roturas, dejando caer también cirios y jarrones con flores. En previsión a que no haya males mayores, incluso se han cambiado de ubicación algunas esculturas secundarias que se encuentran en zonas altas de la capilla, para que no sean lanzadas al vacío de manera involuntaria por el felino. Por ello las personas que suelen acudir a esta capilla, han visto con sorpresa como el retablo cuenta con huecos vacíos.

El principal temor de los que frecuentan la iglesia de Santiago, es que el gato en sus travesuraspueda terminar tirando algunas de las imágenes titulares de las hermandades que tienen en este templo su sede canónica. Por ello, todos, con el párroco Juan Luis Rubio a la cabeza, están inmersos en estos momentos en la operación de captura de este gato, que tantos dolores de cabeza está dando. La asociación Ddevida de Utrera, que lucha en la localidad por los derechos de los animales, se ha ofrecido a colaborar en la captura del gato, ya que aseguran que disponen de los medios adecuados para realizar la captura sin que el animal sufra ningún tipo de estrés.

Esta curiosa historia ha dejado incluso imágenes atípicas, ya que durante alguna eucaristía, algunos feligreses han saltado rápidamente de sus bancos al escuchar algún ruido, para tratar de atrapar a este juguetón felino.